Las tribulaciones de Juande Ramos en Londres
El técnico español Juande Ramos, que el año pasado comenzó con buen pie su trabajo en el Tottenham Hotspur, las está pasando negras en Londres.
Su equipo no ha ganado ningún partido en las primeras cinco fechas de la Premier League esta temporada.
Su victoria de anoche sobre el Newcastle United, como visitante, fue por la desacreditada Copa Carling, y además el plantel del Newcastle ha bajado los brazos, desalentado ante la convulsión institucional en el club.
En Londres corren rumores de que los dirigentes del Spurs están afilando sus navajas, que los días de Ramos están contados, a pesar de que su responsabilidad en la situación deportiva no es tan clara como muchos creen.
Pero es que la inocencia es fatal cuando los culpables son los jueces. Y no cabe duda de la responsabilidad de los dirigentes en la racha del equipo.
El ex internacional inglés David Platt suele decir que cuando los aficionados comienzan a gritar contra un entrenador, los dirigentes piensan en despedirlo, pero que cuando comienzan a gritar contra los propios dirigentes, éstos actúan de inmediato: sin pensarlo más, despiden al entrenador.
(¿Qué pretenden ustedes? ¿Que renuncien los dirigentes?)
Y en la hinchada del Tottenham ya es posible detectar algunas voces contra el presidente, David Levi, y el director deportivo, Damien Comolli.
Levi es el director ejecutivo de ENIC Group, una empresa de productos deportivos que controla el paquete accionario del club.
La figura determinante, para el rendimiento deportivo, es Comolli, un francés que dirigió al Monaco y luego estuvo varias temporadas como explorador del Arsenal, atribuyéndose el mérito de traer varios jóvenes de mérito al club de Arsene Wenger.
Su paso por el Tottenham no ha sido tan exitoso.
Sus torpezas han sido numerosas. La más reciente fue el calamitoso manejo de la salida del club de Dimitar Berbatov, la figura del equipo.
Levi, como es obvio, resistió hasta el último minuto del plazo de transferencias, para arrebatarle el máximo posible al Manchester United, pero su director deportivo no fue tan eficaz para garantizar el buen relevo.
El club recibió US$ 60 millones por Berbatov... y el préstamo por un año de Fraizer Campbell, un suplente del Man U.
Adivinen quién, entre Levi y Comolli, gestionó los US$ 60 millones y quién el reemplazo de Berbatov por Campbell.
Y adivinen quién, entre Levi, Comolli y Ramos, cargará con la culpa del mal rendimiento del Spurs esta temporada.
El partido de anoche, al menos, fue una victoria. También quedó la satisfacción de un vuelco favorable en el rendimiento de Roman Pavlyuchenko, el delantero ruso, cuya adaptación al fútbol inglés ha resultado bastante dificultosa hasta ahora.
El español ha desmentido que se sienta mal en Londres y que esté gestionando su retorno a España.
Es posible que la segunda afirmación sea cierta, pero la primera no lo es: caramba, ningún profesional responsable se siente bien en su vida privada si le va mal en el trabajo.
En la liga, el Spurs ha ganado cinco partidos, con tres derrotas y dos empates. Su diferencia de goles es -3. Está en último lugar, por supuesto: hasta el Newcastle le lleva dos puntos de ventaja.
Aguza el oído, Juande: cuando dejen de pedir tu cabeza y pidan la de Levi, será hora de cambiar de aires.